Jesús que eternamente es Dios (Jn:1) como lo demuestra tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo testamento, por un periodo de tiempo estuvo presente en en la tierra como Hombre (Fil2:7) sin dejar de ser Dios, aunque para nuestra mente finita esto es algo difícil de comprender, Jesús fue completamente humano, con las características de cualquier hombre que camina sobre esta tierra, y completamente Dios. Si pudiéramos hablar de las diferencias entre Jesús y el resto de la humanidad, podríamos decir que efectivamente Jesús se diferencia de todos nosotros en que no tenia una naturaleza pecaminosa, y jamas sucumbió ante la tentación del pecado, el es Santo y sin macha por la eternidad y su periodo como hombre sobre la tierra no fue la execpciòn.
Sin embargo aunque era Dios y Hombre 100% Jesús decidió autonomamente no usar sus propias facultades divinas como Hijo de Dios (segunda persona de la trinidad), sino que mas bien a su deidad añadió humanidad y en esta humanidad decidió vivir completamente como hombre, dejándonos un modelo a imitar. Un ejemplo de esto son los tiempos de oración de Jesús en los cuales Jesús busca la voluntad del Padre, o busca la guía y el poder del Espíritu en su ministerio. De alguna manera diríamos que Jesús vivió la vida perfecta que cualquiera de nosotros deberíamos vivir, todo su poder en la vida y en el ministerio específicamente provienen de su unión e intima comunión con El padre y el Espíritu Santo. de alguna manera que no entendemos completamente Cristo se despoja de sus facultades sobrenaturales y vive la vida como un hombre, pero no un hombre cualquiera un hombre espiritual, dándonos así ejemplo de como debíamos hacerlo.
De esta manera podemos afirmar que Jesús sí abandonó de manera voluntaria algunos de sus atributos, sin que esto quiera decir que dejo algo de su deidad en algún momento. Sin embargo en algunos momentos de su ministerio se vio evidencia de sus atributos como Dios ante los cuales sus discípulos especialmente reconocieron que el mismo era Dios.
5. ¿Se puede decir que Cristo tuvo dos naturalezas durante Su estancia en la tierra?
Efectivamente Cristo al ser concebido por Maria, asumió dos naturalezas una la naturaleza divina que siempre ha poseído desde la eternidad por ser el mismo Dios, y la naturaleza humana que adoptó al nacer en la tierra como un ser humano para poder identificarse con nosotros, morir en la cruz y darnos salvación.
A esta union se le da un término que puede sonar un poco extraño y desconocido, pero que es bueno conocerlo: Union hipostática, este término hace referencia a que Jesús permaneció siempre siendo Dios y al mismo tiempo tomó una naturaleza humana, con un cuerpo plenamentete humano sin ninguna diferencia a nosotros excepto la naturaleza pecaminosa y el no pecado en su vida.
Las dos naturalezas de Jesús, la humana y la divina, son inseparables. Jesús será para siempre el Dios-hombre totalmente Dios y totalmente humano, dos naturalezas distintas en una Persona. La humanidad y la divinidad de Jesús no están mezcladas, sino que están unidas sin la pérdida de una identidad separada. Algunas veces Jesús se conducía bajo las limitaciones de la humanidad (Juan 4:6;19:28), y otras veces con el poder de Su deidad (Juan 11:43;Mateo 14:18-21). En ambos casos, las acciones de Jesús procedían de Su Persona. Jesús tuvo dos naturalezas, pero solo una persona o personalidad.
La doctrina de la unión hipostática es un intento por explicar cómo Jesús pudo ser Dios y hombre el mismo tiempo. Es en última instancia, una doctrina que somos incapaces de entender plenamente. Es imposible para nosotros comprender totalmente cómo trabaja Dios. Nosotros, como seres humanos finitos, no debemos esperar estar capacitados para comprender plenamente a un Dios infinito. Jesús es el Hijo de Dios y fue concebido por el Espíritu Santo (Lucas 1:35). Pero eso no significa que Jesús no existiera antes de que vivienra a la tierra como hombre. Jesús siempre ha existido (Juan 8:58;10:30). Cuando Jesús fue concebido, Él se convirtió en un ser humano, además de ser Dios (Juan 1:1,14)
Jesús es ambos, Dios y hombre. Jesús siempre ha sido Dios, pero Él no fue un ser humano hasta que fue concebido en María. Jesús tomó la forma de un ser humano para poder identificarse con nosotros en nuestras luchas (Hebreos 2:17), y lo más importante, para que Él pudiera morir en la cruz, pagando así el castigo por nuestros pecados (Filipenses 2:5-11). En resumen, la unión hipostática enseña que Jesús es totalmente humano y totalmente divino, que no hay mezcla de ninguna de las dos naturalezas, y que Él es una unidad en Persona, para siempre.
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